El Gobierno anunciaba el pasado 21 de diciembre que no se venderían entradas en las taquillas del Auditorio o de las Murallas Reales, por la finalización del contrato con la empresa que lo realizaba, alegando el encargado de Cultura que “el servicio está garantizado vía venta electrónica”.

El martes día 15 de enero, -según el grupo municipal- se licitaba este contrato de venta de entradas para los espectáculos organizados por la Ciudad, tan solo con un pliego de prescripciones técnicas que con toda urgencia se ha redactado para sacar el concurso, ni siquiera las condiciones administrativas de contratación, ante la demanda del MDyC, el pasado diciembre, dieron las instrucciones para que “a toda velocidad se realizara el procedimiento de adjudicación”.

El movimiento que lidera Fatima Hamed, dice que al Gobierno poco le importa que “las personas que estaban realizando esas tareas hayan tenido que ir al desempleo, que los ceutíes no pudieran tener acceso a la compra de entradas en las taquillas, mandando a las listas del SEPE al personal que realizaba esas tareas, eso es lo que entienden por apoyar el empleo”.